Fotos: Cata Aulet
Texto: gatowoods
Texto: gatowoods
Cusco viaja en el tiempo como barco robado,
ciudad de otros,
circo de un pasado con el que no es negocio hacer justicia.
Cusco no duerme,
ciudad de demonios no colonizados,
caballo salvaje, quimica soledad
«musica para pastillas»
autopistas que van desde las doce
a las diez mil.
Cusco y sus pasillos viejos,
mas viejos que nuestros viejos,
tan viejos como la roca expuesta al sol.
Cuando Gringolandia baja sus marquesinas
aparecen sombras de cuerpos que no están,
silencios que en quechua bendicen las lunas,
piden porque el maiz crezca grande,
tan grande como su nube negra
tan grande como el nuevo hambre.
Antenas, cables, bondis que vienen y que van,
y nosotros que montamos esos caballos de metal
vemos que Qosco en realidad está:
de la Av Cultura para atrás,
del mercado para arriba
y del aeropuerto para allá.
Lo demas es de mentira
ropaje trillado de oferta y demanda
fuentes iluminadas con luces sumergibles
catedrales que no abren sus puertas ni el domingo
la piedra de doce ángulos
la noche donde tocaba gatowoods
queriendo tocar en cualquier otro lugar.
Justo debajo de la fotogénica plaza de armas (auqaypata)
pasa un río entubado que hace unos 500 años
tiempo menos, tiempo mas
supo ver soles, lunas y lluvias
supo reflejar rostros verdaderos
y regar a toda una ciudad.
Cusco descanza bajo las ruinas de saqsaywaman,
ahí terminaron de caer los úiltimos guerreros,
ahi perdieron el hilo de su historia,
donde la rueda se trabó, donde se gestó esta mentira que llamamos «via de desarrollo».
Y nosotros, que con Cata y Jorgito somos exploradores
nos perdimos por las ruinas en la noche
sin tiket ni mapa de salida,
absueltos de pecado
por no estar anclado en ningun puerto
de los habilitados para esta realidad.
Cusco te seduce,
te pierde por sus calles de piedra,
por los caminos del tawantinsuyo
te emborracha con el vino del tiempo
te sacude la cabeza, el esqueleto
babilonica, hermosa y demente.
con fiestas que celebran virgenes
que pasean por toda la ciudad
donde todos beben y bailan.
danzas de burla, danzas de guerra,
danzas de agradecimiento.
Y pensar que el alcholismo en america latina
fue inculcado por los colonizadores
para obligarlos a trabajar,
para poder abusar de las mujeres.
Hijos, nietos y bisnietos de la
epoca de la evangelización de estas tierras.
Cusco contradice la historia
y en heroica mision de vida
este pueblo de gente morena vive feliz.
Cosco juega en la balanza de las cosas que no fueron
y abajo del show de luces y sonido
cada tanto, suspira la pacha
sabe que el echizo esta por romperse.
viejo disfraz de mundo
deja correr el agua cuesta abajo en libertad.
Ahora vivimos en Pisac
tierra de gente campesina
donde un circo mas pequeño
viene al pueblo semanalmente a molestar.
Este es el valle sagrado
profunda grieta en los andes
miradas frescas, niños hijos de la luz.
Y entre cusco y el valle,
al costado del camino
trabajando la tierra
en los buses urbanos y vendiendo chica
estan las mamitas del perú,
de pollera, de sombrero, vestidas de sol
con saquitos de lana y manta (aguayos)
donde cargan mas o menos su vida entera.
madre de sus hijos, de otros hijos
madre tuya y de quien se deje cuidar.
de trenzas negras y profundos ojos,
tan profundos como el silencio
de diez generaciones,
tan profundos como el viento sur.
Vuelven los días de luz
el valle nos da aire y tranquilidad
cata sobreexpuesta en el atardecer
cata riendose mientras teje al sol,
salen las canciones que dejó tirado el tiempo
en la banquina del silencio
para que venga un cantor y las cargue al pasar.
Los amigos ya salieron hace rato
las lluvias estan volviendo
el calor asoma en la ciudad.
El maiz esta como de 20 cm,
La mimosa que nos dice vamos como estamos
vos sabes que ando y ando
solo por el gusto de rodar.
Ya tocamos en el teatro de este pueblo,
me llevo mas de mil historias
de instantaneas en donde cata detuvo el reloj
la playa nos espera,
amplificadores en la arena
andes
donde andes
a los andes
he de regresar.
